lunes, 30 de septiembre de 2013

El Orgullo Es De Idiotas. Duatlon Cros Santa Pola 2013



Esta mañana he participado en la prueba que hizo que empezase a correr hace ahora justo un año.
El objetivo era hacer 1:23 y bajar en diez minutos el tiempo del año pasado, he hecho 1:34:20 y sin embargo estoy muy satisfecho porque he aprendido mucho de la carrera y de mi mismo y mis idioteces.

La Salida estaba organizada en tres cajones con distintas horas de salida para evitar aglomeraciones en el tramo de MBK. Cada año se pasan más, este año éramos 1800 inscritos.

El Primero, corredores élite, federados y los primeros inscritos, salían a las 10:00
El Segundo cajón, mujeres, salían a las 10:03.
Tercer cajón, el resto de hombres, salíamos a las 10:10.


Por motivos de mala organización y dejadez por mi parte, todo hay que decirlo, me ha tocado salir en el tercer cajón para afrontar el primer segmento.

Segmento I Carrera. 
5km - 00.19.05seg

Venía bien preparado y lo sabía. Desde Abril estoy corrigiendo mi postura de carrera y ampliando la zancada. Estoy dejando a un lado la preparación de fondo para MediaMaratón y haciendo entrenamientos más explosivos para entrar esta temporada en el Triatlón. Tampoco me engaño, sé que no voy a ganar nunca y no pienso renunciar a las fiestas, sólo es porque el running por si sólo me aburre.
Salen los dos primeros cajones y la espera de siete minutos se me hace eterna, he calentado para salir a 160 ppm y me están bajando las pulsaciones. Mi plan era hacer el primer segmento a 4.00 ´/km

Salida del Tercer Cajón. Mucha gente con un ritmo muy bajo por delante mía a la que tengo que ir sorteando para adelantar. Mantengo la calma y procuro ir concentrado.
Empiezan a pitar los pulsómetros a mi alrededor, es el km 1, miro mi crono 00:05:25 seg....y me da una punzada en el estómago.
Es el Orgullo, algo que te dice que tú no estás corriendo como debes.

¿Y qué es el Orgullo? Algo inútil que hace que te encuentres por la calle a un amigo que va un Jueves por la tarde al Banco, te das cuenta que te ha girado la cara y te evita y te impide ser tú quien le salude y te vas hecho polvo a casa, algo que te hace que pegues un cambio de ritmo y te pongas a correr a 3:10 min/km los siguientes tres kilómetros hasta que tu isquio dice basta y te da un pinchazo.

Todo viene de la pretemporada, del 23-25 de Agosto. Tenía planeado correr el 25 un 6k a 4 '/km como referencia para la Duatlón. Un amigo me dijo que no podía correr el 23 un 11k que tenía pagado y que si lo quería hacer yo.
Ese Orgullo que dice que sí, que planeas hacer el 11k en 50 minutos y te hace hacerlo, en pretemporada, en 48:30 y 36 horas después correr también el 6k y acabar tocado del isquio.

Cuando acabo el primer Segmento, durante la primera transición, ya sé que voy tocado y que probablemente se acabó el competir esta carrera.

Segmento II MBK 
19 km - 00:52:58 seg

Cojo la mbk y pienso que los isquios casi no se usan en la bici, pero a cada pedalada me da un pinchazo que me recuerda que tengo algo.
Para mejorar la situación, al afrontar el primer tramo de descenso, se me sale la cadena, no una, sino dos veces. No recuerdo las veces que se me habrá salido la cadena en dos años que llevo haciendo bici, ya es puta mala suerte.

Segmento III Carrera
 2,900 km - 00:16:46 seg

Al bajar de la bici, ya sé que no puedo correr. Tengo algo y como nunca me he lesionado, no sé si tengo que seguir o parar. Decido intentarlo a pesar del dolor y veo a unos 200 metros a mi amigo David que salía en el primer cajón y está haciendo su primer Duatlón.
Lo alcanzo y decido acabarlo a su ritmo con él y con Pablo que le está acompañando en su primera carrera.

Esta semana he traicionado mi lema, corazón caliente y cabeza fría y he aprendido que el orgullo sólo sirve para lesionarte, mañana ya me dirá el fisio qué es lo que tengo, veremos si he perdido la temporada y a quien considero un buen amigo, en definitiva, el Orgullo sólo sirve para hacerte daño.


viernes, 19 de julio de 2013

La Noche Que Lo Cambió Todo (parte 3) Canal 9

-¡Hola!- dijo él saludando a la chica.
-¡Hola!- dijo ella sonriendo.
-¡Invítame a un chupito!- dijo Marc.
-¿Qué?- dijo ella extrañada.
-¿No eres de la Comisión?- dijo él. Ella asintió con la cabeza sonriendo.
-Pues que si me invitas a un chupito- explicó él. Ella rio.
-Pero me tienes que comprar la entrada para Pachá antes- dijo ella- invitamos a chupitos a quienes compran la entrada para pagarnos el viaje.
-Bueno, tú invítame al chupito y luego te compro la entrada- dijo él sonriendo.

Ella le miró condescendiente y sonrió.
-¡Qué morro tienes! Anda vamos- los dos se dirigieron a la barra y ella pidió dos chupitos. Brindaron y los bebieron de golpe. 
-Recuerdo que me dijiste que eres de Alcoi- dijo Marc. Ella asintió- ¿Y vienes todos los días?
-No, entre semana estoy en Alicante- respondió ella. El asentía prestando atención.
-Lo que no recuerdo es cómo me dijiste que te llamabas. Yo soy Marc.

-Me llamo Raquel.

***
Alberto prestaba atención a la chica rubia que no paraba de parlotear.
-¡Qué grunge eres tío!- dijo ella mientras soltaba una risotada.
Alberto sonrió, metió las manos en los bolsillos y hundió la barbilla en el cuello de la camisa.
-¿Por?- dijo Alberto.
-Está muy chulo el brazalete que llevas- dijo ella.
-Es un salvatablas- explicó él hablándole a los botones de la camisa- hago windsurf, se me rompió el domingo y ya me lo he dejado- ella dio una carcajada y le empujó suavemente. Alberto estuvo a punto de perder el pie.
Al recolocar la postura, vio a Marc que estaba hablando con las chicas esas de Novelda.


Marc no tenía remedio. Le había dado por ir con ellas a la biblioteca a estudiar a mediodía todos los días. Él les había acompañado un par de veces y se había sentido fuera de lugar. Marc, como siempre, no tenía ningún problema en hablar con ellas de lo que fuese, era la ventaja de ser el nexo de unión de Marc y de Claudio. Él era muy tímido y Marc siempre le presentaba alguna chica que conocía, o cuando salían de marcha, era el que se encargaba de romper el hielo. Claudio y sus ojos, las encandilaba. Él necesitaba cuatro o cinco copas para soltarse y hablar con ellas.
Lo que no entendía de Marc, era qué hacía quedando tanto con esas tres de Novelda que además tenían novio.
Entonces vio a Marisa. 

viernes, 12 de julio de 2013

La Noche Que Lo Cambió Todo (parte 2). Invítame A Un Chupito.

*Viene de La Noche que lo Cambió Todo (parte 1)

Alberto enfiló por la calle San Fernando en dirección al Portal de Elche. Las calles de La Zona eran testigo de la noche alicantina. Grupos de chicos y chicas deambulaban de pub en pub tomando copas en la calle disfrutando de la buena temperatura.
Alberto dirigió el coche en dirección al Mercado y se encontró con unas obras que les impedían el paso.
-Joder como está esto- dijo Marc.
-Están haciendo el túnel del TRAM. Van a unir Alicante con Benidorm con una línea tipo Metro- dijo Claudio.
-Vaya un por culo de obras- dijo Marc. Alberto aparcó en una bocacalle que daba a las obras. Los tres bajaron del coche.

-Bueno Marc, ¿Dónde has quedado con tus amigas esas?- dijo Claudio.
-Tengo que mear- dijo Alberto. Se dirigió a un portal de un edificio antiguo de dos plantas, desabrochó los botones de la bragueta del pantalón y apuntó a una de las paredes. Mientras se la cogía, miró por encima del hombro a sus dos amigos que estaban esperando y empezó a convulsionar mientras reía con carcajadas sordas.
Marc miró a Alberto a ver qué le hacía tanta gracia. El orín de Alberto estaba escribiendo unas letras en la pared del portal, PUT había escrito por ahora.
Los tres comenzaron a soltar carcajadas. Se escuchó una persiana que subía.
-¡Nene! ¿Por qué no te vas a mear a tu casa?- dijo la cabeza de una señora que asomaba por una ventana.
-¡No tengo!- gritó Alberto- Vivo debajo de un puente- Marc y Claudio aplaudieron la chanza con carcajadas.
-¡Qué poca vergüenza! Tendría que limpiar tu madre mañana las cerdadas que nos dejáis todos los fines de semana en mi casa.
Marc y Claudio dejaron de reír. Alberto se la guardó y partieron apresuradamente en dirección Al Barrio.



-Oye comebolas, cómo se llaman las tías esas con las que has quedado- preguntó Claudio.
-Sólo conozco a una, se llama Laura- dijo Marc.
-¿Está buena?- preguntó Claudio.
-A ti te lo voy a decir…
-Entonces es que sí- dijo Claudio- ¿De qué conoces a la pava esa?
-No está buena, está bien y sólo la conozco de un rato- Marc metió una mano en el bolsillo del pantalón- me la presentaron el martes tomando café y me pareció simpática.
-Entonces es que es un cardo- dijo Claudio.
-Entonces es que tú eres un idiota- contestó Marc. Claudio se descojonó.
-Tú y tu rollo no me importa el aspecto físico, sólo lo de dentro- se mofó Claudio- pero nunca te he visto con un cayo.
-A lo mejor es porque las chicas que tienen algo dentro son atractivas porque la atracción mental es más fuerte que la física, de una mente no te liberas ni cerrando los ojos- dijo Marc.
-Lo que tú digas comebolas- se burló Claudio- Pero a una simpática no te acercas una noche de marcha.
-Eso es verdad- dijo Marc-. Será por eso que tú sólo terminas con el cacho de carne que te dura tres micropolvos y a mí las chicas me duran años.
-Iros a la mierda- cortó Alberto- ¿Vamos de marcha o a soltar frasecitas del Club de Los Poetas Muertos?- los tres rieron.
-Vamos a ver si alguna de las amigas de Marc está follable- dijo Claudio.

viernes, 5 de julio de 2013

La Noche Que Lo Cambió Todo (parte 1)

-Eh tío ¡que le den!
La voz de Alberto se imponía por encima del bajo contundente de la radio del coche.
-¿Qué te pasa ahora con Marisa?- preguntó Claudio.
Marc guardó silencio unos instantes.
-La verdad es que Billy Corgan, cuando no se le va la pinza, hace unos temazos brutales- se limitó a comentar mientras movía la cabeza al ritmo de la música-. El otro día me la encontré en la cafetería y estuvimos hablando.
-¡Ostias! ¿Y qué te dijo?- preguntó Claudio.
-Pues al principio no quise hablar mucho con ella...- Marc sacó el móvil para consultar un sms que le había entrado- No quise hablar con ella y se dio cuenta. Me dijo que sentía mucho lo que había pasado en Tarancón, que había estado pensando en lo nuestro y que si quedábamos esta noche para la fiesta de El Paso.
-Tonight...tonight, tonight- tarareaba Alberto acompañando al tema de los Smashing.
-¿Esta noche?- se sorprendió Claudio- ¡Qué hija de puta! ¿Ahora se ha cansado del imbécil del pueblo y quiere volver?
Alberto paró el Seat Cordoba en el vado de casa de Marc.
-Esta noche quedamos- dijo Alberto- pero no vamos a ir a la fiesta, vamos a nuestra bola, nada de tías.



-Primero vamos a mi apartamento de Arenales y hacemos botellón- propuso Claudio- quedan botellas de la última vez, sólo hay que comprar hielo y Coca-cola.
-¡A pillarla por pillarla!- sonrió Marc.
-Y a las tías ¡Que les den!

***
-¡Lo cojo yo!- gritó Marc mientras salía corriendo de su habitación en dirección al salón.
Llegó a descolgar la consola del teléfono al cuarto timbrazo.
-¿Sí? ¿Diga?
-¿Marc?
-Sí, soy yo- no reconocía la voz femenina que escuchaba al otro lado del hilo telefónico.

domingo, 19 de mayo de 2013

Somos De Primera

Somos de Primera.
Por caprichos del destino, en ese momento estaba fuera de Elche, como a ese que le pilló en el baño cuando los compañeros echaban el Euromillón y después no le tocó, y me tocaba perderme una celebración que no se daba desde hacía veinticinco años. 
Pero el ElcheCF es esa mujer a la que, a pesar de que no deja de decepcionarte, que te da una de cal y diez de arena, que con las pocas alegrías que te regala muy de vez en cuando, sigues, porque los pocos momentos que estás con ella te hace sentir, vivir y emocionarte, te hace soñar a pesar de sus desplantes, que cuando parece que va a estar ahí, sientes que te falla, porque cuando te necesita, vas y lo dejas todo, porque alegrías como la de ayer hacen que valga la pena cambiar tus planes y vengas a celebrar que volvemos a ser de Primera después de veinticinco años.

Veinticinco años, un cuarto de siglo, la cuarta parte de una vida, sin fútbol de Primera.
Hace veinticinco años, era socio del club. Mi tío pertenecía a una peña y me llevaba cada quince días al, entonces, Nou Estadi.
En aquel momento, con 11 años, comenzabas a jugar en campo grande y empezabas a comprender el juego. Veías jugar a tu equipo y soñabas con meter los goles de Sixto y ser como Claudio, el siete, tu número, ese delantero espectacular que llegó a internacional con el SuperDepor.
Recuerdo perfectamente el día del ascenso. Mi tío Luís, en el campo, en la Otra Casa, con una mano en el transistor y en la otra una quiniela que repasaba minuto a minuto en tiempo real. Mi padre al lado, diciéndome que que me callara cada vez que preguntaba cómo íbamos, mi tío Gregorio fumando y el grito de todos con el gol de Robi, que ahora ejerce de comentarista de los partidos de Segunda en TDP, el final del partido, las risas y los cánticos.
En aquel año, Rosenda y yo, éramos la voz del programa de deportes de los lunes en la RJ, Radio Joventut,la radio del colegio. Básicamente recortábamos del Información los resúmenes de los partidos de Primera y el del Elche y los leíamos en antena. Ese lunes no. Ese lunes, el estudio era una fiesta, con Juan, Antonio, Raúl, Roca, Dénia, todos los que salíamos en antena en los distintos programas, esperando a que llegase nuestra media hora de programa para montar jaleo y gritar un Mucho Elche en un monográfico del ascenso de nuestro equipo.

Veinticinco años después, continúas siguiendo a tu equipo. Ese equipo, como dice Trainspotting, del que eres hincha y que pierde todos los putos Domingos. Porque ser del Elche es un sentimiento, no es como ser del Madrid o del Barça, del Elche se es porque le quieres, porque siempre temes que te va a fallar, pero vas al Estadio a animar a unos jugadores mediocres porque crees que así les harás mejores, porque crees, quieres creer, que tu aliento les llega y les da ese plus para superar a otros jugadores mediocres de Segunda división soñando con que algún día te subirán a Primera.

Ayer llegó ese día.
El equipo ha hecho una temporada de ensueño, ocupando el liderato desde la primera jornada y va a ser Campeón ya pase lo que pase y con record de puntuación histórica en la primera vuelta. Un equipo que ha funcionado por la implicación de los protagonistas y la impresionante labor de un míster, Fran Escrivà, que merece toda mi admiración, un tipo sensato que en su primera experiencia de entrenador profesional, ha llevado al Elche a Primera. Un trabajador que ha hecho que el equipo tenga diferentes formas de jugar en función del rival y con la capacidad de cambiar el tipo de juego, según lo que necesitase en cada momento el partido, sólo  recuerdo dos partidos en toda la temporada en los que el equipo haya sido claramente inferior al rival, y un orden defensivo espectacular que hace que hayamos recibido a día de hoy veintitrés goles en treinta y ocho partidos, casi un gol cada dos partidos le han podido hacer al Elche.

Ayer el Elche ascendió de forma matemática sin necesidad de jugar, de verse forzado a un gol de Robi,Cuixart, Claudio y tantos protagonistas de los ascensos del Elche.
Si acaso, esta temporada el partido clave fue el de Villareal, con una victoria épica y contundente contra un rival directo, que todos creíamos que iba a ascender por Decreto Ley, en su estadio y empezando perdiendo.

Ayer lo dejé todo, cambié mis planes y fui a La Glorieta a celebrar el Ascenso a Primera con mi gente y poder gritar con ellos MUCHO ELCHE.

jueves, 16 de mayo de 2013

Cervezas de Autor

-¡Qué buenas están estas pizzas¡- dijo ella.
-Es una de las recetas del libro que me regalaste en Navidad, Pizza Napolitana de anchoas y alcaparras, pero como creo que es muy salada le he añadido tomate natural en daditos. ¿Qué bebéis?
-Yo agua- dijo ella.
-Que triste eres. Tengo agua, coca-cola, verdejo y cerveza no te ofrezco porque sé que no te gusta.
-Lo de la cerveza ha cambiado - dijo ella.
-¿Y eso?
-Fuimos a hacer un reportaje para la revista Paladar Gourmet de una nueva marca de cervezas que hace un chico de aquí, Illice Augusta - dijo ella.
-Sí, cerveza de granada.
-¿La conoces? - dijo ella.
-El chico que hace esa cerveza lo conozco de hace años del Foropuntodeportivo. Bueno, sé que es él porque David me ha dicho que uno de los usuarios que conozco que creo que es medio galés, había montado lo de la cerveza de granada. Una cerveza de autor.
-Pues estuvimos el otro día allí y me regaló estas dos botellas - dijo ella.
-!Ostras¡ Pero, si están sin etiquetar.
-Es que aún no tiene las etiquetas para comercializarla- dijo ella- Estas son de naranja y cilantro.
-¿Abrimos una?
-Está caliente- dijo ella.
-Enfrente de la la fábrica de motos donde trabajo, van a abrir una fábrica de cervezas - dijo él- van a comercializar tres marcas, una es Santa Faz, otra Santa Cruz y la otra Santa Bárbara.
-Ni se te ocurra abrir la de Illice Augusta si no estoy yo - dijo ella.
-Quedamos otro día y las abrimos.
-Yo puedo comprar alguna de las de enfrente del trabajo- dijo él.
-Lo que podemos hacer es una cata de cervezas de autor.
-Qué pijo eres- bromeó ella.
-Mira, yo pongo Inedit de Ferrán Adriá, la que me pasa Paco, abrimos la Illice, si tú traes la Santa Faz, ya tenemos para probar unas cuantas. Yo hago unas cocas y preparo un picoteo. Puedo invitar a una pareja de amigos que también les gusta las cervezas de elaboración artesanal y seguro que traen alguna cerveza de autor.
-Vale, ¿el sábado para comer en el Campo?- preguntó ella.

viernes, 26 de abril de 2013

Dr. Deivid & Herr Hide


*Relacionado con La Mesa y Té Tuareg

-Pase por aquí- La señorita cerró la puerta y lo dejó en la habitación de azulejos blancos que chapaban las paredes. Limpios, impecables, al menos esa es la impresión que daban. Numerosos percheros de madera salpicaban la pared, al menos dos docenas pudo contar. Un banquillo de madera, se alineaba bajo la constelación de percheros.

-(¿Me siento o espero de pie?)- El suelo, con planchas grises, daba perfecta función a lo que se esperaba de él, que no resbalase.
-(Sentado voy a parecer un colegial esperando en la puerta del director)- Del techo colgaban tubos fluorescentes. Ahora, que estaba él solo, sólo estaba encendida una de las cuatro fases. Seguro que todos juntos daban buena luz.
Ahora que se fijó mejor, justo encima de la línea de percheros, la pared no estaba tan limpia. No es que estuviese sucia, pero los azulejos brillaban con un tono opaco en lugar del blanco níveo del resto de la estancia.
-(Che!, pues me siento)- a su izquierda, detrás de la baja pared donde no había percheros, se oía un grifo que goteaba.
Allí en el silencio de la soledad, se dio cuenta que no era uno solo el grifo que goteaba, tic, tic, por lo menos eran dos, si no estabas callado, podrías pensar que era uno, pero los tic eran diferentes al caer.

-Nain, no suba la puja!!!-Ahora que prestaba atención, al fondo de la habitación, se escuchaba de lejos, una voz-Jugadorrres como ese, sientos en merrrcaden, ja?!
(Parece que donde acaban las perchas hay una puerta. Dará a un despacho)
-Clin!!!- el sonido del teléfono al caer sobre la consola, denotaba que el interlocutor lo había dejado con fuerza.
Una sombra avanzó hacia la puerta del fondo del vestuario.
-Ja?! Usted debe serrr el nuevo doktorrr del equipo!
-Hola buenos dias, Doctordeivid, señor.
-Ja?! Maister, le estabamos esperrrando-Como suele ocurrir con los centroeuropeos, el tono de voz, no tenía nada que ver con su lenguaje corporal.
El rostro, anguloso, enmarcaba una expresión seria, afable, lampiña, hasta en el cuero cabelludo, la tez ligeramente morena, hablaba de una persona que pasaba mucho tiempo al aire libre. El joven doctor interpretó que estaba ante una persona seria y determinada.

-Bien, ja?!, porrr corrrreo electrrronico ya le comuniqué lo que se esperrraba de usted, diagnostico de posibles futurrras lesiones de los jugadorrres. La prrrevension es la clave de una plantilla corrrta!Oh! Doktor, que poca educasion la mia, Zofem, Klaus Zofem, dirrrektorrr managerrr del club.

***

La cosa funcionaba.
La temporada empezó bien,  el grupo parecía más sencillo de lo esperado.
Los jugadores podían jugar relajados más encuentros de lo habitual y el análisis de tratamiento de prevención, en colaboración con los fisios, era fácil.

Hacía poco tiempo que se había formado un nuevo club en la ciudad Athletic Carabassím "Los Gaferos". Las directivas de ambos clubs pactaban derbis amistosos que casi siempre, acababan con victoria del club del  joven doctor.
En pocos días, tras terminar la Liga, jugarían un nuevo amistoso.
Herr Zofem dio la orden de salir con suplentes, pero no muchos, ya que había que mantener la supremacía de Herrdoktor como equipo hegemónico de la ciudad.
-Tratamiento base normal, vitaminas y mucho liquido, a las 12.30 existe riesgo de deshidratación.-
La cosa no fue como el conjunto visitante esperaba, Carabassí estaba usando nuevas tácticas, delantero defensivo y nuevas adquisiciones.


martes, 23 de abril de 2013

La Ridícula Idea De No Volver A Verte

*Relacionado con Siberia

Las piedras gruñían debajo de ellos. A cada paso, los crujidos del camino, amortiguaban el silencio de las ramas, solamente roto por la suela de sus zapatos.

-¿De verdad te apetece?
-.

Las cortas sombras jugaban a arrancar destellos de su melena, en una desordenada acuarela de tonos pajizos y bronces.

-¿Pero donde es?- preguntó ella. Él señaló con el dedo detrás de los árboles. Le pasó una mano por detrás de su chaqueta tweed de LloYd´s animando a su espalda a continuar hacia la casetas de madera que se escabullían detrás de los troncos de unas acacias.

-¿Qué se supone que vamos a ver aquí?- su pie resbaló con un guijarro del camino- ¡Jolín! Y yo con tacones-. Marc le sujetó por la cintura.
-Pensé que te gustaría ir a la Feria- le sonrió él.

Unas casetas de madera blanca se alineaban a ambos lados del camino de tierra pisada, aún húmeda por la primavera. Allí donde las siluetas de las copas de los árboles no llegaban a abrazar las parcelas del terreno, se podía ver a parejas y grupos de amigos, tumbados en el césped, disfrutando de la digestión, remoloneando a la tarde que comenzaba, rendidos al  cálido baño de los rayos del sol.
Algunas casetas, madrugadoras, ya habían levantado sus toldos de madera anunciando a los visitantes que daban por comenzada la jornada vespertina.
El reluciente brillo de una calva, que iba acompañado al brazo de un cardado tintado de rojo, se demoraba por los primeros puestos, ojeando con parsimonia cada uno de los ejemplares expuestos, preguntando a una aburrida barba descuidada, mientras señalaba el que tenía más a mano.

-No sé qué es lo que se supone que hemos venido a ver aquí- gruñó ella.
-Sonia, a mi me gusta bucear en los estantes por ver las novedades. Además, a veces encuentras algún ejemplar que falta de una colección o algún título de un autor que es difícil de encontrar- explicó Marc- me gusta venir y respirar el olor a celulosa y manosear el papel barato y sin tintar de los libros de bolsillo. Es muy probable que en unos años, ya no existan los libros de papel.

-¿Por dónde empezamos?- Sonya le regaló una mueca burlona.
-Si quieres vamos a las firmas científicas por si quieres ver algún libro de fotografías de bilogía.
-Jolín, ¿Qué quieres, que me vaya ya?- se quejó Sonya. El camino, más transitado, libre de pequeños cantos, hacía más estable su caminar.
-Vamos a ver si viene algún escritor esta tarde y hay firma de libros- propuso Marc- compramos un ejemplar y que nos lo dedique.
-Eres un friki- sus pasos les dirigían a una caseta que estaba abriendo en ese momento su portón.

martes, 16 de abril de 2013

Té Tuareg

*Relacionado con El Regalo y Siberia

El eco de sus tacones retumbaba en el portal.
Al llegar a la puerta de metal, pulsó para llamar al ascensor. Se iluminó el triángulo con la flecha hacia abajo.
El suelo de goma del habitáculo amortiguó el sonido de sus zapatos. Admiró a una chica de tez nívea y labios carnosos y rosados que se arrullaba en un abrigo de Max Mara que le devolvía una mirada azul. Presionó el número cuatro.
Al llegar al rellano de la cuarta planta, dirigió sus pasos a la puerta numero dos.

-Hola ¿Qué tal estas?
-Hola- susurró ella antes de darle un corto beso en los labios.
-Pasa- Marc le cogió el abrigo que le ofrecía ella y la guió al estudio-biblioteca- ¿Qué tal el vuelo?
-Otro vuelo, para mí es tan entretenido como pintarme las uñas.

Sonya observó la habitación, dirigió sus pasos al escritorio que hacía las veces de despacho y se sentó encima de la mesa con las piernas cruzadas.
-Así que este es tu sancta sanctorum- seis estanterías Billy blancas en ele abarrotadas de libros ocupaban la mitad de las paredes. Un sillón relax de piel chocolate y dos sillas de escritorio, eran el resto del mobiliario,
-¿A qué hora llega tu amigo?
-Estará al llegar- dijo Marc-. Mira- cogió una bolsa de plástico transparente que contenía unas madejas vegetales color verde. Sonya le preguntó con la mirada- es té verde Tuareg. Me lo ha traido mi tío Paco del Sahara.
-¿Dónde está esa tienda?
-No, del Sahara, Sahara- sonrió Marc-. Mi tío Paco es el aventurero de la familia. La primera vez que fue al Sahara, fue en los ochenta con un Simca mil. Le dio por meterse en el desierto y apareció en un pueblo de mala muerte, se quedó encantado. Al año siguiente compró un Land Rover y lo llenó de material escolar y ropa para regalárselo a los niños y gente de allí. Fue con otro chico que es farmacéutico. Hicieron un tour ellos solos en plan aventura cambiando lo que llevaban a cambio de hospitalidad en diferentes aldeas.



Sonya le miró con mala cara.
-Sí, yo tampoco tendría estómago para viajar así, pero la verdad es que te hace soñar cuando venía con las diapositivas y te contaba cómo vivía la gente- Marc se sentó en el sillón relax-. El caso es que en uno de los trayectos por el desierto, el Land Rover se rompió y se quedaron tirados. Bebieron hasta el agua del radiador. Tuvieron la suerte de que les encontró una caravana de Tuareg que los acogieron. Parece ser que tienen la costumbre de, si le salvan la vida a alguien en el desierto, adoptarlos como uno más de la caravana. El que los encontró primero, los acogió como miembros adoptivos de su familia.
-Jolín ¡Vaya historia!
-Ahora ya no va todos los años, pero fue en Octubre y me ha dado este té y me ha explicado cómo se prepara, porque tiene un ritual para sacar toda la esencia a la hoja del té- sonó el timbre del interfono-. Ese debe ser Doc.

martes, 9 de abril de 2013

Sushi Para Tres


* Continuación de Denia y El Día Después

No paraba de pulsar el móvil. Apuntaba a la televisión con el teléfono y volvía a mirar la pantalla táctil.
-Aaayyy- volvió a concentrarse en las instrucciones que tenía abiertas en el  Vaio.
El pitido del interfono le sobresaltó. Fue corriendo desde el sofá y oprimió el pulsador azul del interfono.
-¡Sube!- dejó la puerta de la casa abierta y volvió a pelearse con la televisión que se había quedado sin volumen.

-¿Hola que tal estás?- saludó él.
Ella no contestó, seguía mirando su Xperia y la pantalla del portátil y movía los labios rezándose las instrucciones. De repente se pudo escuchar la sintonía de Anatomía de Grey.
-¡Toma!- exclamó triunfal- Ahora sólo me falta aprender a cambiar de canal.
-¿Qué haces?- preguntó él- ¡Oye! Tele nueva.
-Sí- ella seguía sin mirarle.
Él se acercó por detrás y le tapó los ojos con las manos. Ella se dignó a prestarle una sonrisa y darle su atención.
-Hola- susurró Júlia. Marc esperó unos segundos más, pero ella seguía concentrada en la tarea de programar la app del móvil.

Marc fue a la cocina, abrió la puerta de la nevera y puso al frío la botella que había traído.
-¡La cena está a punto de llegar!- gritó ella desde el salón.
-¿Qué has pedido?- voceó él.
-¿Qué?
Marc se acercó de nuevo al salón.
-Que qué has pedido.
-Para que veas que te cuido, he pedido sushi- Marc le miró sorprendido.
-¿Tú sushi? ¿La señorita si está un poco rojo es que la carne está cruda, ha pedido sushi?- se burló él.
 -Me convenciste con eso que me dijiste que las anchoas y los agrios también son pescado crudo y me gustan- dijo ella dejando de mirar por primera vez el móvil o la televisión. Marc sonrió.



-Júlia, vengo muerto, me he pasado el día en quirófano y después consulta, ¿Me invitas a un café?
-¿A estas horas?- se extrañó ella- En la cocina está la Nespresso ¿sabes cómo funciona?
Marc asintió con la cabeza y se dirigió a la cocina.

Júlia siguió su batalla con la televisión, se quedó mirando un momento la pared, suspiró y se levantó del sofá.
-Yo lo quiero largo e intenso- dijo ella mientras abrazaba a Marc por detrás. Él se giró y se dieron un corto beso.
-¿Quieres un café?
-No me refiero al café- esta vez el beso largo y apasionado fue interrumpido por el timbre del interfono. 
Se dirigió por segunda vez esa noche al interfono y abrió la puerta del portal. Volvió a abrazarse a Marc, puso cara de niña traviesa- Tampoco me refería al beso- le susurró al oído.

viernes, 5 de abril de 2013

Denia

*Continuación de La Mesa (Segunda Oportunidad)


"Por dentro
donde nadie sabe verte
donde nadie se ha atrevido a entrar
donde dicen que hay peligro de derrumbe
donde a veces siempre duele
donde cuesta respirar"

-Vale, sí que me gusta.
Ella le miró de reojo y le sonrió, volvió a centrar su atención al frente.
El espejo que era el azul del Mediterráneo a esas horas de la mañana, le hizo olvidar lo cansado que estaba después de las horas de viaje.
-¿Cuándo llegamos?- preguntó imitando a un niño pequeño.
-Pronto- respondió ella alargando las oes-. Venga, retiro lo dicho sobre las reglas del coche.
-¿Me dejas poner la música un rato?
-A pesar de ser mi coche, haré una excepción.

Marc pulsó las entradas del equipo de audio y pasó por CD, FM1, FM2 hasta llegar a BT-STREAMING. Desactivó la conexión del Xperia de Júlia y sincronizó su móvil con el Bluetooth de la radio del coche y buscó en su lista de temas.
-¿Qué vas a poner?
-A ver si adivinas.
-A ver, a ver- Júlia arrugó el entrecejo- ¡El Sueño de Morfeo!
Marc le sonrió.
-¡Melendi!- bromeó ella.
-Como sigas insultándome, me bajo del coche.
-¡Bisbal!
-¡Para el coche!
Júlia se desternillaba de risa.
-Apuesto por Los Planetas- Marc le miró de reojo y le sonrió- Pero que no sea nada de malos rollos.
-Confía en mí- dijo él- Además en esta canción sale una parte de ti- los primeros acordes del temas llenaron el habitáculo.


desde antes que amaneciera
estuve esperando en tu puerta
desde las seis de la mañana
esperando a que vinieras”


-Me gusta como huele tu coche- dijo él.
-Es un ambientador que compro por internet- Júlia cambio de marcha- ya no lo noto.
-Pues sí que se nota- Marc tocó el frasquito de cristal que estaba enganchado en el respiradero del salpicadero- Olor a nuevo. Mola.

Marc tarareaba la letra de la canción.
Pensó en lo raro que se sentía viajando de copiloto en el coche de ella. Le gustaba su Audi A3 , por dentro tenía acabados en piel beige y rojo, a juego con el bermellón de la carrocería.
-¿Y cuando se supone que salgo yo?- preguntó ella.
-No sales tú, sale una parte de ti- Marc subió un poco el volumen-.  Ahora.

“no la he podido olvidar
que desde el momento en que la vi
no he pensado en nadie más

miro la luna
que se refleja
en sus ojos verdes
cuarto creciente”


Júlia le sonrió.
-La pena es que casi no se le entiende.
-¿Te gusta?
-Que sí, pesado- dijo ella sonriendo.
-¿Pesado yo?- dijo él- ¿Cuándo llegamos?

martes, 2 de abril de 2013

El Día Después

*Continuación de Segundo Premio

-(¡La puta!)- retumbó en su cabeza.

Creyó abrir los ojos, pero no pudo asegurarlo, todo lo percibía en un negro carbón.
Estiró el brazo buscando la lamparilla de la mesita de noche. Tanteó en el aire y no encontró nada. Se tumbó sobre ese costado y se estiró más pensando que así alcanzaría la luz de su mesita, pero siguió encontrando el vacío más absoluto.
-(¡Joder! ¿Donde está la puta mesita?)

Decidió que se incorporaría en la cama y así la buscaría mejor.
Se sentó en el borde del colchón y en las tinieblas, siguió buscando una mesa que no quería dejarse encontrar.
Pensó que se tendría que poner en pie.
Cuando dio el primer paso, topó con la pared.
-(¡La puta! ¿Qué hace aquí una pared?)

Ahora que estaba de pie, pudo ver una rendija de luz que se colaba por debajo de lo que parecía una puerta.
En su mente algo le dijo que la puerta de su cuarto no debería estar ahí, pero era lo único que le alejaba del terciopelo negro de la estancia.


  Palpó lo que parecía una puerta de madera y encontró el pomo. Al abrir, un cañón de luz le hizo daño al esfínter de su iris. Cuando pudo habituarse, encontró el interruptor de la luz.
-(¡La puta! ¿Donde estoy?)
La habitación le era totalmente desconocida. Esto le asustó un poco. No sabía donde estaba, qué hacía en aquel lugar, ni cómo había llegado allí.

Se sentó en la cama y meditó unos instantes. Seguía sin recordar. Sabía que anoche había quedado para cenar con unos amigos, pero no recordaba con quién.
Se rascó la piel reseca de los muslos, entonces tomó consciencia de que iba desnuda de cintura para abajo.

sábado, 30 de marzo de 2013

Monas y Fogassetas

Esta es la receta clásica y artesanal de la Mona de Pascua de la casa de mi abuela, mi madrina y mi Tata Paqui.
Tradicionalmente, nos reunimos en familia para hacer monas el Viernes Santo por la tarde noche.
Empezamos a las ocho de la tarde y acabamos a las cuatro de la madrugada. Hacemos dos hornadas porque la masa es muy delicada y para tener una segunda oportunidad por si la primera sale mal.


Ingredientes:

-3 Kg de Harina normal.
-850 gr de azúcar.
-500 ml de leche entera.
-500 ml de zumo de naranja exprimido a mano. No debe de ser exprimido a máquina o licuado.
-500 ml de aceite de oliva.
-11 huevos talla L batidos.
-180 gr de Levadura fresca.
-Ralladura de piel de dos naranjas y dos limones. Sin llegar a la parte blanca o amargará.
-2 huevos talla L batidos para adornar.
-200 gr azúcar para adornar.

-Queso, ensaladilla, agrios, coca rellena, habas, vino, cerveza, agua y entrantes varios.

Masa Creciente.
-Se disuelven los 180 gr de levadura en el medio litro de leche tibia ( a menos de 40 grados o matas la levadura).

-Se añaden 6 cucharadas de harina y se mezcla con las manos de forma que no queden grumos. Obtenemos una gacha ligera.

-Se tapa con un film transparente y la dejamos reposar unos 20 o 30 minutos, hasta que la masa dobla su volumen.

Masa principal.
-Se tamiza la harina y se reservan unos 50 gr.
-En un lebrillo brillante grande o un barreño grande ( nuevo y lavado por favor, no seáis cerdos) se echan los 2900 gr de harina y con las manos hacemos un hueco en el centro formando un volcán.
-Se añade el azúcar y las ralladuras y se mezclan un poco en el fondo del volcán.


-Se añade el aceite y lo mezclamos evitando que se formen grumos, respetando las paredes del volcán.


-Se añade el zumo y lo mezclamos evitando que se formen grumos, respetando las paredes del volcán.




-Se añaden los huevos y lo mezclamos evitando que se formen grumos, respetando las paredes del volcán.



-Se añade la Creciente y con un movimiento circular y envolvente, se añade poco a poco la harina de las paredes del volcán, amasando con los dedos evitando que se formen grumos.



-Cuando hemos conseguido una masa homogénea, se vierte en el mármol de la cocina ( limpio por favor) enharinado.
-Se añade harina muy poco a poco ( otra persona debe ir añadiendo harina muy poco a poco al mármol y el que amasa debe ir " buscando" con la masa la harina) y se hacen movimientos envolventes suaves como si se lavase una prenda delicada a mano en una pila.


No se debe tocar en exceso la masa o se sobará y estará muy densa la mona final, como una coca boba, que es lo que obtienes al hacer la mona en la Termomix ( esto va por alguien cuyo nombre empieza por S y acaba por usana).
-Se amasa sin apretar, no estamos haciendo pan. Se debe presionar muy suavemente, como si tocásemos un pecho.



Primera Subida.
-Cuando la masa prácticamente no se pega al mármol ( no hay que pasarse echando harina) se pasa la masa al barreño grande limpio y seco. El barreño debe de ser tan grande teniendo en cuenta que la masa, al subir, doblará su volumen.

-Se tapa el barreño con una sábana limpia que no toque la masa y se envuelve con una manta.

-Lo dejamos reposar en una habitación templada a unos 22 o 24 grados. Tarda en subir unas tres horas.
No hay que estar destapando la masa todo el rato para mirar, hasta las tres horas mínimo no va a subir.

-Te vas a la mesa y te tomas la picaeta. Tienes tres horas para cenar y disfrutar como desees.


-Sabemos que la masa ha subido, cuando ha doblado su volumen y cuando al presionar suavemente con un dedo la masa, desaparece la huella que hemos dejado, en unos cuatro o cinco segundos.


Segunda Masa.
-Una vez ha subido la masa, mojamos las manos en aceite de oliva( para que no se nos pegue la masa en los dedos) y cogemos porciones con las manos.


-Hacemos formas de "cabezas de setas" con las manos.
No se debe apretar la masa, ni hacer bolas, ni tocarla mucho.
Se trabaja muy suavemente, procurando que la parte que luego se verá dorada de la masa, sea uniforme, sin picos ni grietas.
Calculamos el tamaño de cada porción teniendo en cuenta que la masa después volverá a doblar su volumen.


Segunda Subida.
-Se introducen las monas en una habitación a unos 20-22 grados, sin corrientes de aire y no se tapan.
-Tardará en subir una media hora o cuarenta y cinco minutos.


-Sabemos que la masa ha subido, cuando ha doblado su volumen y cuando al presionar suavemente con un dedo la masa, desaparece la huella que hemos dejado, en unos cuatro o cinco segundos.


-Si queremos adornar la mona con un huevo cocido, se debe de poner antes de que suba la masa, presionando muy suavemente en el centro y lo cubrimos con dos tiritas de masa, para que la masa al subir, no lo haga más de un lado que del otro.


-Tenemos listo el horno eléctrico a 180 grados, placa arriba y abajo (no grill) y la bandeja en la segunda altura.
-Si es horno de leña, se introduce un folio en el horno un minuto. Si sale marrón suave es horno flojo. Si sale marrón canela es horno medio-fuerte. Si sale marrón oscuro es horno fuerte.
Nos interesa un marrón canela.


-Introducimos la mona y tardará en dorarse unos 20 o 25 minutos en función del tamaño de la masa.



-La masa está cocida cuando se dore. Esta receta es artesanal y no debes dejarla marrón tostado, porque amarga, esto no es una mona de Mercadona.
-Cuando esté dorada y aún caliente, se pinta la superficie con huevo batido y se adorna con el azúcar.



-Se introduce otra vez en el horno 30 segundos.


Degustación.
-Se deja enfriar bien antes de comer.
-Lo tradicional es disfrutarla para desayunar o merendar o sola o acompañada de chocolate a la taza o en onza ( no la toméis con salchicha de pascua ni con sobrasada, no quiero mirar a nadie alcoyanos, por favor).

-Con esta receta, la mona aguanta perfecta hasta cuatro o cinco días. No se debe guardar en un cartón, ni en un plástico.
Se deben guardar en un armario de la cocina tapadas con una servilleta de tela.

 

Bon Profit!