martes, 15 de enero de 2013

La cama


-¿Te tienes que ir?-preguntó él.
-No imagino poder estar en ningún lugar mejor que junto a tu cuerpo desnudo-contestó ella.
Marc apoyó la cabeza en el pecho de Júlia y le acarició el mentón. No podía parar de mirarle a los ojos negros. Jugueteó con su pelo.
-¿Cómo me dices esas cosas?-preguntó él.
Ella guardó silencio.
Prendas de ropa tiradas por el suelo y unas sábanas arrugadas habían sido testigo de lo que había pasado allí hacía unos minutos.
Ella le dio un suave beso en los labios como única respuesta.
-¿Te ha gustado mi regalo de cumpleaños?-preguntó Marc con una sonrisa.
-No digas eso, suena feo-bromeó ella mientras su mano jugueteaba con la curva de la espina dorsal de Marc-. Pero sí, es el regalo que más me ha gustado de esta noche.


Los bucles del cabello de Marc caían desordenados por sus hombros. A Júlia le gustaba el olor de su pelo pelirrojo natural. Júlia pudo verse reflejada en sus ojos verdes.
-¿Quieres que me vaya?-preguntó ella
A Marc le cambió la expresión de felicidad del rostro al de incredulidad.
-¿Por qué iba a querer que te fueses?-le preguntó extrañado.
-Ya veo que no quieres. Lo decía porque me has preguntado que si me tenía que ir. No sé si mañana tienes guardia-se explicó Júlia.
-Sí que trabajo mañana. Pero ¿Crees que es algo que me importe mucho ahora?-le susurró él.
Puso una pierna sobre el vientre de ella, se acercó un poco más a su rostro y comenzaron a besarse.
-Podría acostumbrarme a este tipo de regalos-dijo Júlia entre susurros.

Habían sido unos días maravillosos. La llamada de Marc, cuatro días antes, le había sorprendido. A Marc lo conoció mientras estudiaba en la Universidad. No compartían facultad, pero sí que habían estudiado carreras sanitarias.
Marc era un chico que había aparecido accidentalmente en su vida ocho o nueve veces y que siempre le encantó. Por el lenguaje corporal de Marc, Júlia sabía, sentía, que esa atracción era correspondida. Por caprichos del destino, siempre que se habían cruzado sus vidas, él o ella habían tenido pareja. Hasta hace cuatro días en que Marc llamó a Júlia y habían quedado para ir al cine. Ésta era la segunda vez que quedaban, esta vez con los amigos, para el cumpleaños de Júlia.

-¡Sí claro!-dijo él entre risas-¿Y a mí que me vas a regalar a cambio?
-Será que tú no has disfrutado también del regalo...-dijo ella seductora.
-¡Calla!-dijo de repente Júlia.
-¿Qué pasa?-dijo él.
-Escucha-. De fondo se escuchaba el inconfundible ritmo y los gemidos de una pareja haciendo el amor.
-¡Madre mía ! ¡sí que se oye!-dijo Júlia.
-Debe de ser la chica del Cuarto B. Vive sola y tiene una vida social muy activa-contestó Marc.
-Ya oigo lo activa que es-dijo Júlia divertida.

-¿Te importa si nos han escuchado a nosotros?-sonrió Marc.
-¡Qué me va a importar!-Júlia cogió con suavidad a Marc del cuello y le besó.- ¿Qué me va a importar a mi nada cuando estoy contigo?
-Podrías estar siempre conmigo-dijo Marc con una sonrisa.
-No me soportarías-bromeó Júlia.
-¿Por qué no?-dijo Marc serio-vente a vivir conmigo.
-Sabes que soy muy complicada-siguió bromeando Júlia-mi vida es muy complicada.
-Te lo vuelvo a decir. Vente a vivir conmigo, aquí, juntos.
Júlia se puso seria, se incorporó un poco en la cama y le miró fijamente.
-Marc. No sabes lo que me estás pidiendo.
-Vente a vivir conmigo. ¿Qué tienes que perder? Volver a vivir en casa de tus padres, después de haber estado años fuera de casa, es muy duro.
-Marc, por favor, no sigas. Tú me gustas mucho. Estos dos días que hemos quedado, me han ayudado mucho a evadirme de mi situación personal, pero no voy a venirme a vivir ni contigo ni con nadie-se sinceró Júlia muy seria.

Júlia se preguntaba qué pasaba por la cabeza de Marc para proponerle una cosa así.
Es cierto que ambos se conocían hacía muchos años y que los dos acababan de salir de unas largas relaciones, pero ella no tenía claro ni qué iba a ser de ella misma. Por ahora se dedicaba a trabajar duro y retomar el contacto con las amistades de siempre.
Marc había tensado mucho la situación y Júlia estaba incómoda. No sabía muy bien qué decirle a Marc para que no se sintiese rechazado, él le gustaba mucho y sentía que podría llegar a estar con él mucho tiempo. Pero Marc había forzado la situación y muy pronto.

-Marc-no sabía muy bien cómo decírselo-creo que es mejor que me vaya. Pasado mañana, si quieres,  podemos ir al cine como habíamos quedado y volvemos a hablar. No creo que ahora mismo seamos capaces de decirnos algo coherente.
-Júlia no te vayas por favor-suplicó Marc.

Júlia se levantó de la cama. Recolectó su ropa del suelo de la habitación y se la puso apresuradamente. Sólo quería salir de allí, de aquella situación.

Marc observaba muy triste cómo se vestía Júlia. Decidió levantarse también de la cama. Sacó unos bóxer limpios del vestidor y se puso una camiseta tongue de los Rolling.
Acompañó a Júlia a la puerta de la casa.

-Júlia-dijo triste-no te vayas. Hablemos. Nos sentamos en el sofá y hablamos.
-Marc, es mejor que me vaya-intentó hacerle comprender ella-dejemos pasar mañana y antes de ir al cine hablamos. Anda dame un beso.

Se besaron apasionadamente bajo el marco de la puerta abierta del piso de Marc. Parecía que no se podían separar, que no querían separarse.

Júlia salió a la calle y fue en busca de su coche.
-Mierda-maldijo ella.

Marc se quedo solo en casa preguntándose por qué Júlia no había querido quedarse a hablar con él. Se dio cuenta de que tal vez lo que le había propuesto a ella había sido un error.
Marc no pudo aguantar las ganas de llorar.
Fue a la habitación a recoger su ropa que estaba tirada por el suelo con la mirada cegada por las lágrimas. Le sobresaltó el pitido del interfono.
¿Quién sería a estas horas?

-Marc abre-. Era Júlia. A Marc se le aceleró el corazón. Sentía que había vuelto a por él. Júlia lo había pensado mejor y venía a estar con él.
Cuando abrió la puerta y la vio en la puerta, no pudo resistirlo y se echó a los brazos de Júlia.
-Te quiero, te quiero. Sabía que no estaba equivocado. Sabía que volverías-dijo él en el cuello de Júlia.

A Júlia se le puso un nudo en la garganta.
-Marc-dijo Júlia-por favor no hagas esto-no sabía cómo decírselo-. Marc, tú me gustas mucho y quiero seguir contigo, pero no he vuelto por lo que piensas. Me he dejado el bolso con las llaves del coche.

Júlia pudo ver como se ensombrecía la mirada de Marc.
Él entró en el salón, donde habían empezado a besarse en lo que ahora le parecía había sido una eternidad, cogió el bolso de Júlia y se lo llevó.

-No sabes lo que quieres-dijo él casi sin voz.
-No sabes lo que quieres, ni sabes a quién quieres-Marc estaba elevando el volumen de su voz-eres una desgraciada y haces desgraciados a los demás porque no sabes lo que quieres-Marc ya estaba gritando.
-Marc por favor no grites, dime lo que quieras, pero…
-Eres una desgraciada y una persona que no duda en decir lo que sea con tal de engañar a los demás y conseguir lo que quieres-dijo con todo el rencor del mundo Marc.
-Marc, las cosas que te he dicho son sinceras, yo no quiero hacerte daño…
-Eres un mierda ¿Cómo te atreves a decirme lo que me has dicho hace un momento mientras hacíamos el amor y después huir como una cobarde cuando alguien te abre su corazón?

Júlia se sintió muy triste. Las palabras de Marc le habían herido en lo más hondo de su ser.
Se dio la vuelta y bajó las escaleras andando, no quería esperar al ascensor con Marc mirándole desde el quicio de la puerta.
Cuando llegó a la puerta del portal, todo le daba vueltas. No conseguía recordar donde había dejado el coche. Vio un banco de madera y se sentó. Se sentía mareada. Las palabras de Marc, tronaban en su cerebro y no se callaban.
Se levantó y, por azar, encontró el coche. No sabía cómo sus pies le habían llevado hasta allí.

Entró y arrancó el motor. El reproductor de música se encendió de forma automática. Por los altavoces, Júlia escuchó el inicio de una canción que le taladró el corazón.

“Con viento del este hiciste una cama
soplaste sobre ella para templarla
y con el murmullo de tu voz de agua
me cantabas nanas sin letra
y dormíamos tan juntos
que amanecíamos siameses
y medíamos el tiempo
en latidos”


BSO Diecinueve Maga
* Relacionado con Pop

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